Ya se los ve por los caminos un día y otro, a pie, en marchas sin término de cientos de kilómetros, para llegar hasta los «olimpos» gobernantes a recabar sus derechos…..Porque esta gran humanidad ha dicho «¡Basta!» y ha echado a andar. Y su marcha, de gigantes, ya no se detendrá hasta conquistar la verdadera independencia, por la que ya han muerto más de una vez inútilmente. Ahora, en todo caso, los que mueran, morirán como los de Cuba, los de Playa Girón, morirán por su única, verdadera e irrenunciable independencia“.
Ernesto Che Guevara
La situación de los dos países centroamericanos, Honduras y Panamá, es muy parecida del punto de vista de la violencia contra las protestas sociales y los abusos contra los derechos humanos: el primero, es víctima de un golpe de Estado cívico-militar y el segundo, dirigido por un gobierno fascista, dispuesto a toda costa a defender los intereses del imperio de los EEUU.
Para denunciar a nivel mundial la grave situación de estos dos países, una brigada de compañeros internacionalistas, integrada por 4 catalanes y catalanas de FRENADESO Catalunya, una italiana, una argentina, una alemana y un mejicano, iniciaron el pasado 28 de julio, una Caravana por el respeto a la Vida y la Dignidad del Pueblo panameño. La caravana partió desde Chiapas, en México, continuó en Guatemala y en El Salvador, después en Tegucigalpa, Honduras. Un compañero de Frenadeso Noticias se incorporó a Managua, en Nicaragua. El 12 de agosto la caravana llegará a Costa Rica y el 13 de agosto concluirá a Changuinola, Bocas del Toro, Panamá.
Hace pocos días, pude entrevistar un representante de la Caravana, Eduardo Cuesta, catalán, y Luis José Baquedano, dirigente hondureño del Frente Nacional de Resistencia Popular (FNRP), que apoya el camino del convoy.
Pregunté al dirigente Baquedano que me ilustrara el proyecto, por qué buscaron contacto con el FNRP.
“Estos compañeros están buscando el apoyo de los movimientos sociales en los países que tocarán y claramente el FNRP, apoya cualquier actividad pacifica, que denuncia la militarización norteamericana de la región. El capitalismo y el fascismo, los grupos de la oligarquía y de poder, no aceptan que los pueblos de América Latina hayan decidido apoderarse de su suerte, de refundar las naciones, de exigir cambio y de querer forjar ellos mismo su futuro”, me contesta el compañero Baquedano.
Al compañero Cuesta, en cambio, domando como creen hacer conocer este proyecto al mundo, puesto que los medios de comunicación más conocidos callan sobre el acontecimiento.
“En efecto, no se sabe nada en los medios de comunicación. Los compañeros del Panamá tienen un sitio en internet, www.frenadesonoticias.org, o bien se pueden encontrar informaciones en www.kaosenlared.net, dónde existe una sección dedicada al país centroamericano.
Nosotros, los participantes de la caravana, creamos un blog dónde mantenemos al día las noticias de los movimientos del convoy, solidaridadpanama.blogspot.com , y escribimos muchos reportajes sobre las experiencias que afrontamos”, me dice Cuesta.
A continuación domando cuáles son los objetivos de la caravana, y Eduardo me contesta que se han sumado a un llamado de FRENADESO, que es el Frente Nacional por la Defensa de los Derechos Económicos y Sociales en Panamá, que denuncia, la aprobación de la Ley 30, o “ley chorizo”. Esta ley trata de limitar el acceso a la cuota sindical a los sindicatos con el fin de liquidarlos, al negarles la posibilidad de sostenimiento económico impidiendo que dicha cuota sea deducida del salario del trabajador tal cual se ha negociado y pactado con los empleadores en la mesa de negociaciones y aprobado en asambleas generales de trabajadores. En el ámbito ecológico se exime al Estado de la presentación de los necesarios estudios de impacto ambiental en obras que el Ejecutivo considere de interés social, esto puede incluir desde nocivos proyectos hidroeléctricos y mineros a cielo abierto hasta la apertura del Tapón del Darién, reserva ecológica de la humanidad. En el aspecto de derechos humanos, se proporciona impunidad y licencia a los policías para matar, ya que estos, en el ejercicio de sus funciones, podrán abusar de su poder y de ahora en adelante asesinar a un panameño sin ser detenidos ni siquiera de manera preventiva.
La Ley en mención dio origen a grandes protestas en Panamá.
Por su parte, la ley “del carcelazo”, que se aprobó en abril también en Panamá, dicta penas de prisión entre seis meses y dos años para los participantes de las manifestaciones y huelgas que obstruyan la libre circulación.
La respuesta del Gobierno a las protestas fue la represión brutal y salvaje. En Bocas del Toro, autoridades de los pueblos originarios y diversas organizaciones hablan de 10 muertos, incluidos niños por afectaciones respiratorias, producto de la gran cantidad de gases lacrimógenos lanzados en áreas residenciales.
Ante esta política de terrorismo de Estado, de flagrante violación a los derechos humanos y a las garantías fundamentales de los panameños, un grupo de brigadistas internacionales tomaron la iniciativa de desarrollar una Caravana por la Defensa de los Derechos Humanos en Panamá.
El objetivo es la derogación inmediata de la ley 30 y de la ley del carcelazo, además de la institución de una Comisión de la Verdad para aclarar lo que pasó a Bocas del Toro.
Eduardo sigue diciéndome que en los pasajes en los muchos estados, hasta a ahora, se sumaron diferentes colectivos de los movimientos sociales, así que esperan llegar numerosos a Panamá.
Continúo, preguntándole al compañero Baquedano si alguien del FNRP se juntará a la caravana.
“Después de una reunión, hemos decidido que haremos una movilización el 18 de agosto de 2010, mientras en todos los países centroamericanos, al mismo tiempo, pararán las calles en forma de protesta. Queremos que la comunidad internacional se acuerda de lo que sucedió en Honduras el 28 de junio de 2009, que sepa el clima de terror que rige en la región, dónde matar y reprimir, hoy, es un hecho muy común y que siempre queda impune”.
Eduardo Cuesta acaba subrayando que el mensaje debe ser unitario en todos los países, sobre todo centroamericanos, “porque ayer tocó a Honduras, hoy en Panamá y si no paramos esta ola de violencia y fascismo, bien pronto el imperio norteamericano, con sus tropas, habrá ocupado la región y los más pobres y los explotados perderán completamente sus derechos y las esperanzas de poder vivir un mundo mejor”.
Ida Garberi, periodista de defensoresenlinea.com
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