Por: Camilo Rengifo Marín
La joven abogada afrocolombiana Francia Márquez fue designada como candidata a vicepresidenta colombiana por el centroizquierdista Pacto Histórico que lidera Gustavo Petro, quien lleva amplia ventaja de cara a las elecciones presidenciales del 29 de mayo, aunque la derecha y los grupos de poder, empresariales y mediáticos, tratan de descarrilar la locomotora centroizquierdista.
Es un notable triunfo para Márquez, quien se dio a conocer por su incansable activismo contra los impactos ambientales de la minería en el municipio de Suárez, en el Cauca, del que tuvo que irse por amenazas.
“No es uno y dos, es uno y una, en un equipo trabajando por Colombia”, dijo Petro. «Las mujeres de Colombia, los territorios excluidos, los pueblos excluidos por su color de piel son los tres pilares que la vicepresidencia va a tener en el primer gobierno popular de Colombia», subrayó el candidato presidencial ak confirmar que Francia será su compañera de fórmula.
Afrodescendiente, abogada, feminista, militante de la paz y los derechos humanos, y reconocida activista medioambiental y aún sin experiencia como funcionaria pública, Márquez se había impuesto con más de 780.000 sufragios no solo como la segunda precandidata más votada del Pacto Histórico, sino como la tercera en las consultas interpartidistas del pasado 13 de marzo, por encima incluso del aspirante de centro, Sergio Fajardo.
Durante su discurso en el acto oficial de presentación, Márquez dedicó unas palabras a la juventud colombiana, que el pasado año «se puso en pie» y demostró que «es posible construir una Colombia mejor» durante las protestas contra el Gobierno del ultraderechista Iván Duque, que goza del 78 por ciento de reprobación del pueblo.
«Gracias por esta oportunidad, son cada colombiano y colombiana en su diversidad desde las regiones que posibilitaron que estemos hoy aquí», manifestó la activista que en 2019 entró al listado de las 100 mujeres más influyentes e inspiradoras en el mundo-«Nuestra tarea será cerrar las brechas de inequidad y desigualdad de los territorios excluidos y silenciados. Queremos que como colombianos todos podamos vivir sabroso en este país», aseguró Márquez.
Durante la campaña presidencial Márquez puso sobre la mesa temas que no estaban presentes en la agenda política, como la equidad entre las regiones, la perspectiva feminista del proceso de paz y la sostenibilidad ambiental como eje del desarrollo productivo. Tuvo posiciones incluso más progresistas que Petro, por ejemplo, al hablar de temas como el aborto y el derecho de las mujeres a decidir sobre su propio cuerpo.
Sin haber ocupado cargos públicos y con una campaña de escasos tres meses, Márquez se opuso fervientemente a proyectos gubernamentales que alteraban el río Ovejas, un afluente que nutre su municipio en el Cauca. Precisamente por eso fue reconocida en abril de 2018 con el Goldman Environmental Prize, el equivalente al Premio Nobel del Medio Ambiente, y en 2015 con el Premio Nacional de la Defensa de los Derechos Humanos en Colombia.
También fue incluida en 2019 en la lista de las cien mujeres más influyentes del mundo que elabora la cadena británica BBC.
Francia Márquez, quien tendrá su base de operaciones en la ciudad de Medellín, capital de Antioquia. Aunque los medios especulaban que además de la vicepresidencia ocuparía el cargo de ministra de Ambiente, se confirmó que estará al frente de la creación del Ministerio de la Igualdad. En los últimos días la prensa especuló que se guardaría la postulación a la vicepresidencia para algún dirigente liberal, si esta agrupación política se sumaba a la candidatura de Petro.
Márquez dijo durante la proclamación de su vicepresidencia que nunca ha negado la necesidad de trabajar por el Partido Liberal, con el que “hay toda la apertura para avanzar. Otra cosa que dije fue el problema de (el expresidente) César Gaviria como persona: representa el neoliberalismo, representa más de lo mismo y este país requiere un cambio”.
Desde la prensa hege,ónica se señaló que estas palabras de Márquez molestaron a Gaviria, quien tomó una decisión drástica en medio de la campaña presidencial de romper los diálogos con el Pacto Histórico que lidera Gustavo Petro, hecho que no confirmó ninguno de ellos.
Desde el comienzo de la campaña de la consulta del Pacto Histórico hubo el compromiso entre todos los candidatos de que el que sacara la segunda mejor votación iba a ser la fórmula vicepresidencial, pero en los últimos días
La derecha colombiana se atragantó con la alta votación lograda por el Pacto Histórico que lidera Gustavo Petro en las elecciones parlamentarias del 13 de marzo, y hoy trata de cortar de toda forma el camino que lo llevaría a la presidencia tras las elecciones del 29 de mayo.
Petro cuestionó la decisión del registrador Alexander Vega de pedir un reconteo general de los votos para el Senado tras aparecer 390 mil votos del Pacto Histórico que no habían sido sumados en el conteo inicial, y advirtió que “los votos están en poder de una mayoría uribista” y “no hay una cadena de custodia transparente”. “Estamos ante un verdadero golpe de Estado impulsado por el expresidente Álvaro Uribe”, señaló.
¿Coincidencias? El registrador Alexander Vega solicitó un reconteo general de los votos correspondientes al sufragio del Senado, y el presidente Duque afirmó que «es recomendable considerar, por parte del Consejo Nacional Electoral avanzar con un reconteo general en la elección a Senado.»
Camilo Rengifo Marín. Economista y docente universitario colombiano, analista asociado al Centro Latinoamericano de Análisis Estratégico (CLAE)
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