Fuente: Página12
Entre la Hidrovía del Paraná, Estados Unidos y Rosario
El exembajador argentino ante la OEA Carlos Raimundi analizó los primeros 100 días de gestión de Javier Milei y la creciente presencia castrense en la vida política nacional. “A este proyecto hay que custodiarlo militarmente”, señaló en AM750.
El exembajador argentino ante la Organización de Estados Americanos (OEA) Carlos Raimundi analizó los primeros 100 días de Javier Milei al frente del Ejecutivo nacional: “No tenemos un gobierno, tenemos un plan de negocios privados”, sostuvo, en diálogo con AM750.
Para el exdiputado nacional, la gestión de La Libertad Avanza representa un “daño permanente que se fue acumulando desde el día 1”. “(Milei) Se ha convertido en una persona muy conocida en el mundo, es decir, lugares que tradicionalmente no le han dado importancia a la Argentina, ahora, por la extravagancia del personaje, lo tienen en agenda”.
Y recordó la participación del Presidente en el último Foro de Davos, en enero pasado, donde el Jefe de Estado arremetió contra el comunismo internacional: “Cometió una serie de inexactitudes fuertes, conceptuales e históricas, pero la mala calidad de su discurso no quiere decir que él no represente un proyecto de poder a nivel mundial muy fuerte, que no está encarado por Estados sino por monopolios, corporaciones y fondos de inversión. Él se anima a decirle a todo Davos que son todos comunistas. Juntó a la social democracia, los liberales, a todo el mundo, y les dijo: ‘Son todos comunistas porque acá lo único que vale es el mercado’. Es grotesco”, señaló Raimundi en Campana en 750.
Relaciones peligrosas con Estados Unidos
Consultado por la política exterior del Gobierno nacional, Raimundi se refirió a la próxima visita de la jefa del Comando Sur estadounidense, Laura Richardson, quien, se prevé, arribará a nuestro país en los primeros días de abril.“Espero que no se confirme, porque sería la defraudación más grande que le podamos hacer a nuestros héroes de Malvinas si el 2 de abril nos visita la OTAN”, planteó.
En esa línea, el exembajador argentino ante la OEA vinculó distintos hechos que se sucedieron en las últimas semanas en relación a la creciente militarización del territorio nacional. “(Mieli) Coquetea con el gobierno demócrata (de Estados Unidos) y se abraza con Trump en la reunión ultra conservadora en Washington. Y en esa reunión de la CPAC (Conferencia Política de Acción Conservadora) hubo una parte más privada donde planificaron a mediano y largo plazo la utilización de las redes sociales”, enfatizó Raimundi.
“Por eso, cuando Milei llega acá y dice que va a orinar a un gobernador, que el Congreso es nido de ratas o le dice down al gobernador de Chubut, no es casual ni es producto de un impulso. Obviamente, es una persona desequilibrada, pero es parte de un proceso de descuartizamiento del lenguaje, como para poder abarcar todos los niveles de caos posibles dentro de una sociedad, para terminar finalmente en que la sociedad reclame un orden, que en este caso será neofascista y va a tributar a las grandes corporaciones”, analizó.
Y cerró: “A todo eso hay que custodiarlo militarmente. Tenés al jefe de la CIA de visita; al Ejército de EEUU controlando la red troncal del río Paraná, en complementación con lo que había hecho Paraguay en su parte de la Hidrovía; la presencia del Comando Sur y la militarización del problema de seguridad en Rosario. ¿Para qué? Para liberar el Paraná, la carga y descarga. Si lo combinás con el proceso de dolarización, tenés la conversión del anarcocapitalismo en narcocapitalismo, porque eso libera el ingreso y salida de sustancias ilegales y la presencia del narcotráfico. Y a esto hay que sumarles la reunión que hace luis Petri (ministro de Defensa) con Cecilia Pando y familiares de los genocidas condenados por crímenes de lesa humanidad y el proyecto de ley firmado por Patricia Bullrich (ministra de Seguridad) y Petri para la militarización de la sociedad para prevenir el estallido social, que seguramente será la consecuencia del plan de ajuste social que estamos teniendo”, concluyó.
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